El marketing directo forma parte de la estrategia de toda
empresa dispuesta a estar cuando y donde el cliente le necesita. Una
herramienta en continua renovación, gracias a las nuevas tecnologías, para
incrementar la calidad, la oferta y la prestación de los servicios de empresas
de los más variados sectores. Una de las grandes ventajas del marketing directo
es que promueve una mayor cercanía entre empresa y cliente, un trato más
personalizado. El lanzamiento de una nueva idea, un nuevo producto, debe ir
acompañada de una campaña de marketing directo para redoblar no solo su
alcance, sino la respuesta entre el potencial público.
Toda empresa o firma debe saber comunicar. El marketing
directo es el conjunto de herramientas para mejor la comunicación (mailing,
emailing, telemarketing, marketing electrónico) con los clientes reales o
potenciales con un objetivo comercial. Por lo tanto, toda transmisión de
información por parte de la empresa debe estar analizada de forma que su
contenido sea lógico, coherente con el objetivo perseguido y con los valores de
la marca o producto que se quieren transmitir. El marketing no solo nos permite
llegar a un público con unas características más específicas y acordes a la
demanda actual, sino que nos permite comprobar si la realidad del producto
cumple con las expectativas que sobre él se habían formulado.
El marketing directo es una oportunidad para diferenciar
nuestro producto y, al contrario de otras herramientas de publicidad y
promoción más tradicionales, aporta mayor efectividad a un coste menor. Hay más
ventajas, o argumentos, para apostar por este tipo de estrategia, ya que
permite llegar al cliente de manera más directa, en el momento más idóneo y
prever de una manera más fiable cuál será su respuesta en un futuro. Las
acciones de marketing directo nos permiten un mejor análisis de los resultados,
es decir, analizar si la respuesta ha sido satisfactoria en función del número
de informaciones o comunicaciones remitidas, así como saber cuál ha sido la
acción con los resultados más satisfactorios o el perfil del público que mejor
ha respondido.
Apostar por el marketing directo es hacerlo por una forma de
comunicación más cercana, más fluida, más acorde con lo que el receptor
necesita en cada momento. Acciones donde la creatividad es un valor añadido
para captar la atención del público y, sobre todo, conseguir su fidelidad y
confianza.
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